Los reclutadores y el uso de las redes sociales
Gestión de personasLas redes sociales han tenido un fuerte impacto en el mundo de los recursos humanos y han implicado una transformación en los procesos y métodos utilizados por sus profesionales, que se han visto obligados a adaptarse a nuevas formas de trabajar y relacionarse con los candidatos.
Más concretamente, en los procesos de selección, los reclutadores pueden utilizarlas para obtener información de las candidaturas que pueden complementar el currículum vitae tradicional. Esta práctica permite conocer mejor a la persona que hay detrás del perfil profesional e identificar determinados aspectos de sus vidas que quizás no surgirán durante la entrevista y que son de gran valor para el reclutador.
Aunque esta praxis es conocida por todos, ¿lo tenemos en cuenta cuando compartimos contenido por las redes? ¿Realmente somos conscientes de la facilidad de acceso a estos datos? ¿Y de su influencia en la decisión final de una selección?
Mediante un sencillo análisis de un perfil se puede ver cómo se presenta un candidato en el entorno digital para poder determinar su encaje con la cultura de la empresa: valores, opiniones, motivaciones, intereses que comparte con la organización… incluso todas las habilidades comunicativas a la hora de redactar mensajes.
Con las nuevas tecnologías, se han traspasado las fronteras entre la vida personal y la laboral. Las empresas buscan trabajadores que no muestren conductas inapropiadas, ordinarias o violentas. Por eso, y sobre todo en aquellas redes sociales más vinculadas al mercado laboral, como LinkedIn, es importante crear una identidad digital profesional.
Sin embargo, estas comunidades virtuales nos ofrecen una muy buena oportunidad para cultivar nuestra marca personal, influyendo activamente en la imagen que queremos proyectar en el exterior, y compartir contenido con responsabilidad para que te perciban como profesional e influyente. Cuando se dispone de buena marca personal, las oportunidades laborales y de colaboración se multiplican.
En conclusión, la presencia en las redes sociales no debe ser negativa por sí misma. Puede ser muy beneficiosa si son utilizadas correctamente y con cautela, siendo muy conscientes de los peligros y consecuencias que pueden comportar.