Productividad y jornada laboral: un equilibrio necesario
Asesoramiento juridicolaboralEl Gobierno español ha anunciado la voluntad de reducir la jornada laboral para todos los sectores a 37,5 h/semanales el 2025. Esta propuesta nace de la necesidad de encontrar un nuevo equilibrio del tiempo, organizándonos los usos sociales y los horarios en una diversidad de ámbitos.
Según los últimos informes publicados, más de un 35% de las mujeres de nuestro país consideran que no tienen tiempo de ocio para ellas, argumento que comparten más de un 20% de los hombres encuestados. Tanto es así, que el malestar social por la falta de equilibrio con el tiempo y los horarios hace que, hoy en día, España lidere el ranquin europeo de baja satisfacción laboral.
La necesidad de encontrar este equilibrio ha llevado a la administración general a plantear reducir la jornada laboral. La propuesta presentada por el Gobierno, redactada por la Time Use Iniciative, apuesta por reducir las horas trabajadas gradualmente, empezando por 37,5 h el 2025 e ir hacia las 32 h/semanales. Las empresas deberían disponer de la libertad de flexibilizar la negociación de la aplicación: recuento semanal, mensual o anual, aunque como mínimo, para ayudar a rebajar el malestar social se recomienda reducir la jornada 30 min diarios.
Es importante recordar que con la reducción de la jornada se consiga mejorar el equilibrio entre la vida persona y laboral, pero es necesario que las empresas implementen otras medidas que las acompañen. Desde Grup Carles podemos ayudarte desde la planificación y hasta la implementación de estas medidas.
El equilibrio del tiempo
Haciendo un análisis general, poniendo el foco en los países del sur de Europa principalmente, comparten características generales en el ámbito laboral; productividad estancada, aumento de la digitalización y automatización de los puestos de trabajo, desigualdad económica entre hombres y mujeres, etc. Si ponemos el foco en España y Cataluña se comprueba que el problema se agravia debido a los horarios y usos de tiempo respecto a los otros países de Europa:
- España tiene una pausa excesiva a la hora de comer que produce alargar el horario laboral a la tarde y, por lo tanto, reducir el tiempo de ocio después de la jornada laboral. Un 30% de los trabajadores, lo hace hasta las 19 h, mientras que un 10% acaba después de las 21 h.
- Un 15% de los trabajadores tiene una jornada de más de 48 h semanales, incrementando así riesgos para la salud y augmentando el estrés que acaba produciendo entre el 30% y el 60% de las bajas laborales actualmente.
Aprovechando las transformaciones, sobre todo la migración hacia la transformación digital, hay que evolucionar hacia un modelo más productivo, sostenible, saludable e igualitario. Son varias las medidas que hay que implementar en las empresas para conseguirlo, pero la reducción de jornada puede ser una de las principales a adoptar.
¿Qué beneficios tienen las empresas que implementan la reducción de jornada?
Trabajar menos horas implica que los trabajadores dispongan de más tiempo para dedicar a sus relaciones personales, mejorar el descanso o dedicarse a sus aficiones. La calidad del sueño y alimentación mejora la salud de las personas trabajadoras, disminuyendo así las bajas laborales provocadas por cansancio, estrés o fatiga. También reduce el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares, sobrepeso, diabetes, entre otras. Así mismo, la reducción de jornada para dedicar más tiempo a las actividades personales produce un aumento de satisfacción y motivación a las personas trabajadoras que se traduce en un incremento de la productividad para la empresa. Estas medidas también disminuyen el absentismo laboral, una cuestión importante a tratar en la actualidad.
Para aquellos sectores en los que se experimenta una escasez de talento, la reducción de jornada puede resultar una medida clave de atracción y retención de talento.
En algunos casos, la reducción de jornada no se ha planteado como la reducción de las horas diarias, sino en compactar las jornadas laborales en cuatro días. En estos casos, además de los beneficios indicados anteriormente, se añaden el impacto ambiental, ya que se produce una disminución de la movilidad y se fomentan los hábitos saludables como cocinar en casa o desplazamientos en bicicleta o a pie.
La optimización de los horarios de trabajo y la reducción de jornada laboral son pasos necesarios, pero no suficientes para conseguir el equilibrio en la gestión del tiempo. Es necesaria una ley que establezca el uso del tiempo que implique a todos los sectores sociales y económicos de la sociedad. Este nuevo modelo debe adaptarse a los cambios estructurales de cada época y evolucionar con el progreso.