Cierre del año para sociedades: qué revisar antes del 31 de diciembre

Las últimas semanas del año son un momento clave para cualquier empresa. El cierre contable y fiscal no solo implica cumplir con las obligaciones legales, sino que es una oportunidad para optimizar la carga fiscal, reducir riesgos y preparar un nuevo ejercicio con información fiable y sólida.

A continuación, te explicamos los puntos esenciales que deberías revisar antes del 31 de diciembre para que tu cierre sea completo y, si es necesario, puedas maximizar los beneficios fiscales disponibles.

1. Resultado contable y ajustes pendientes

Antes de cerrar el ejercicio, es recomendable analizar:

• Si hay gastos pendientes de imputar o provisiones que deban reconocerse.

• Si existen ingresos devengados aún no contabilizados.

• La correcta aplicación de las normas de deterioro, amortizaciones y provisiones.

Una revisión exhaustiva permite ajustar el resultado contable y evita discrepancias en la liquidación del Impuesto sobre Sociedades.

2. Amortizaciones e incentivos fiscales

Conviene revisar:

• Si todos los activos incorporados durante el año han sido amortizados correctamente.

• Si has realizado inversiones en digitalización, eficiencia energética o tecnología verde, comprueba si puedes aplicar incentivos fiscales o amortización acelerada.

Muchas empresas no aprovechan todas las deducciones disponibles, y hacerlo puede reducir de manera significativa la base imponible.

3. Pérdidas fiscales pendientes y compensación de bases negativas

Las sociedades pueden compensar bases imponibles negativas de ejercicios anteriores, dentro de los límites legales. Si tu empresa arrastra pérdidas de años anteriores (bases negativas), revisa qué cantidad queda pendiente de compensar.

Si prevés beneficios en este ejercicio, no desaproveches las compensaciones disponibles para ahorrar cuota a pagar en el Impuesto sobre Sociedades.

4. Conciliación de saldos con terceros

Antes de finalizar el año, es recomendable contrastar:

• Cuentas con clientes (facturas pendientes, impagos)

• Cuentas con proveedores (deudas, facturas por regularizar)

• Préstamos o deudas con entidades financieras

• Cuentas con administradores, socios u operaciones internas

Una conciliación correcta ayuda a evitar sorpresas fiscales, errores en el balance y posibles reclamaciones.

5. Operaciones vinculadas

Si tu empresa tiene operaciones con personas o entidades vinculadas (socios, familiares, empresas del grupo), es necesario garantizar:

• Que se realizan a precios de mercado.

• Que toda la documentación obligatoria está actualizada.

Este punto es frecuentemente objeto de revisión por parte de la Administración. Una buena gestión evita sanciones y problemas legales.

6. Dividendos, retribuciones y decisiones de final de año

Antes del cierre, la empresa puede valorar:

• Si conviene repartir dividendos o mantener los beneficios en reservas.

• Si existen retribuciones pendientes a administradores o personal clave.

• Si es recomendable anticipar o diferir determinados gastos o ingresos.

7. Revisión rápida de otros aspectos relevantes

• IVA, IRPF y otros impuestos indirectos: deducciones, regularizaciones y ajustes finales.

• Nóminas y Seguridad Social: variables, bonus y cierre anual.

• Subvenciones: correcto tratamiento contable y justificaciones pendientes.

• Tesorería: proyecciones de caja y necesidades futuras de financiación.

Estas decisiones pueden influir notablemente en la carga fiscal y en la planificación de la empresa de cara a 2026.

Un buen cierre fiscal y contable garantiza información fiable y decisiones acertadas para el nuevo ejercicio. Contáctanos para que nuestros expertos puedan asesorarte.